Capítulo 19 - Querer es poder -

No veo a Marcos por ninguna parte, no puede haber ido muy lejos, él no se conoce esto, no me lo conozco ni yo. No coge el teléfono,  puede que no tenga mi número o algo por es estilo.

Me acerco a Manu "Siento interrumpiros pero tengo que hablar  con Manu un momento es importante, tranquila enseguida te lo devuelvo, yo no lo quiero."

Lorena nos sigue con la mirada y Manu solo mira el suelo. Le pregunto por Marcos, y me dice que sí,  ha venido con él,  pero lleva un rato sin verlo ni saber nada de él. No me puedo creer que sea tan irresponsable. Ando unas 3 manzanas, pero no está, cuando giro la última esquina para dar la vuelta a la cuarta manzana aparece alguien que hace que me tropiece y me caiga al suelo, cuando levanto la cabeza... Raúl se me aparece con una sonrisa de oreja a oreja.

Ali: ¿Tú?

Raúl: Hola, ¿No te han dicho nunca que eres muy patosa?

Ali: ¿ Ya ti no te han dicho nunca que eres insoportable? Dejame en paz.

Raúl: Por aquí no lo encontrarás.

En ese momento aparece Manu que se sorprende al verme en el suelo hablando con Raúl,  se acerca, Raúl le saluda y se va lo más rápido que puede.
Manu no sabe como tomarse eso, me coge la mano y me ayuda a levantarme,  dice que ha estado buscando pero que no encuentra a Marcos. Yo le cuento lo que me ha dicho Raúl,  y Manu solo se limita ha decirme que lo habrá encontrado y lo habrá llevado a casa. Le explicaría el porqué de mi inseguridad y mi preocupación pero él seguro que se lo contaría todo a Rosi, o peor, iría directamente a por Raúl.

Manu intenta llamar a Marcos, a la quinta vez que le llama lo coge y le dice que se había perdido pero que un chico moreno y alto que a veces duerme en casa le había llevado a otro sitio, que no sabe donde está ni nada pero que está bien.
Raúl ha sido Raúl,  yo ya no agunto más, mañana por la mañana hablo con Rosi, y que pase lo que tenga que pasar.

Al día siguiente

Son las 10, el sol entra por la ventana y me da en la cara, no se puede estar más agusto. Si no fuese porque a los cinco minutos de volver a coger el sueño noto como alguien abre la puerta y como me acaricia el pelo, yo finjo estar dormida, pero consigo abrir un ojo, es Manu con una bandeja. Él se me queda mirando y sonrie a la vez que me acaricia, no se que es lo que pretende.

Abro poco a poco los ojos, como si estubiese medio dormida todavía.

Ali: ¿Manu? ¿Que haces aquí?

Manu: Em... te he traido el desayuno.

Ali: ¿Y eso?

Manu: Es mi manera de pedirte perdón por haberme llevado a Marcos de fiesta y haberle dejado solo.

Ali: Mmm... Zumo de naranja. Bueno vale va, te perdono.

Manu: Bueno te dejo desayunar tranquila.

Ali: No no, ven desayuna conmigo,  alguien tendrá que comerse el chocolate.

Manu: ¿No lo quieres?

Ali: No me gusta el chocolate... Se que es raro pero... Yo soy de oreo.

Manu: Bueno hacemos una cosa, mientras tú te despejas un poco, yo bajo a por las Oreo, y desayunamos.

Al cabo de un minuto se abre la puerta, se me hace la boca agua solo con pensar que es Manu con las Oreo, pero cuando asoma la cabeza, no es Manu, es Raúl.

Desde la puerta, sin atreverse a pasar me advierte: "Marcos esta vez ha vuelto,  si cuentas algo, no volverá. "