Capítulo 21 - Querer es poder -

"Creértelo, lo oí todo, no se merece ni que le mire."

Le explico a Jenny mientras almorzamos en la cafetería. No se acaba de creer lo de Hugo, dice que parecía que me quería tanto, ya decía yo que era muy bonito para ser verdad, voy de mal en peor, yo creo que me han echado un mal de ojo o algo así. Esta mañana he estado desayunando con Marcos pero sigue sin recordar nada y cada vez me preocupa más, supuestamente ya debería de haber recuperado la memoria por poco que fuese. Me ha estado contando como se lo pasó con Raúl el sábado y como se llevaba con el grupo de Manu, la verdad es que lo veo contento, supongo que al dejar de discutir con mamá ya no está todo el día de morros.

Cuando acabamos de almorzar me levanto para tirar los envoltorios a la basura que estaba justo en la puerta, cuando me doy la vuelta oigo a Lorena.

"No lo entiendo Manu, ella no es como yo te lo puedo asegurar y eso que no se de quién me hablas, ¿Y todo lo que me decias? ¿Mentira? Como eres tan... uf, sabes que te digo, que mejor para mí."

Está justo en la esquina y que esté chillando ayuda a que la oiga mejor, Manu le ha dicho algo que ha hecho que se ponga así, pero no he podido oírlo y no debe de haber sido agradable, ella está que echa humos, normal, está hablando con Manu, el chico que logra que en menos de un minuto de conversación ya te pongas de los nervios, pero también se hace de querer enseguida. Manu se harta de oír chillar a Lorena, la deja con la palabra en la boca y viene hacia mí, eso no es que la tranquilice mucho.

Manu: No te he visto esta mañana.

Ali: ¿Que le has dicho? Esta muy enfadada.

Manu: Es que Lorena es así, va de creída y cuando a una creída le das calabazas, eso es lo que pasa.

Ali: ¿Le has dado calabazas? ¿Y eso?

Manu: Me he enterado que tu también se las has dado a Hugo ¿No? ¿Porqué?

Ali: He preguntado yo primero, listo.

Manu: Que tiquismiquis eres rubia.

Ali: Ya estamos, imbécil, si lo llego a saber no te pregunto.

Manu: Joder, como te pones.

Ali: Si no fueses tan borde.

Manu: Bueno, vamos ha hacer un trato, ahora nos vamos a clase, pero esta noche me paso por tu cuarto y hablamos ¿Te parece?

Ali: Solo si traes contigo un paquete de oreo o un zumo de naranja como el del otro día.

Manu: ¿Se lo pongo en su bandeja de plata o de oro?

Ali: Borde.



Después de comer, a las 16.00h.

Amo hacer la siesta, pero lo que odio tener que despertarme para ir a entrenar, y encima después tengo que ir a dar clases al chico nuevo. Me hace ilusión ir hoy a entrenar, de pequeña hacía patinaje artístico pero cuando empecé la eso lo dejé, estaba en esa edad tonta de creerme más mayor de lo que soy, y sí, yo creía que el patinaje artístico era para niñas pequeñas, pero hace poco vi un dvd que tenía guardado Sara y recordé el porqué patinaba, el porqué competía y lo mejor de todo el porqué tenía trofeos y medallas, era buena en eso, se me daba bien. Y lo recuerdo porqué yo soy muy patosa para todo, no se me da bien hacer casi nada, y el patinaje es la excepción que confirma la regla.

Cuando acaba el entrenamiento paso por la sala de baile, la puerta esta medio abierta, solo puedo ver lo que refleja el espejo. Hay un chico alto, con el pelo negro y unos ojos azules preciosos, está bailando hip-hop y la verdad es que lo hace bastante bien pero como solo puedo ver un poco del reflejo del espejo no lo puedo ver bien, me acerco un poco más intentando que no me vea pero cuando por fin lo veo todo no como mi cuerpo se va inclinando poco a poco hacia delante hasta que me tropiezo con la mochila y me caigo, haciendo que la puerta se abra tanto que da un portazo contra la pared.

Ali: Em... Hola.

Chico: ¿Que estas haciendo?

Ali: Pasaba por aquí y he oído la música, tenia curiosidad.

Chico: ¿No te sabes el dicho que dice que la curiosidad mato al gato?

Ali: Lo siento.

Chico: Ya.

Ali: Bueno yo creo que es mejor que me vaya yendo, es tarde.

Chico: Sí, mejor.

Ali: Ah, y bailas muy bien.

Chico: A ti lo del patinaje tampoco se te da del todo mal.

¡Tierra tragame! Un momento, ¿El como sabe como patino yo? Por favor, dime que si me pellizco ahora me voy a despertar de esta pesadilla tan vergonzosa. Si es que lo que no me pase a mi, no le pasa a nadie, tengo una suerte...
Vale... son las 17:10 y a y media tengo que estar en el colegio, ¡no me va a dar tiempo! Que estrés.

17:35h.

Subo las escaleras lo más rápido que puedo, el primer día y llego tarde. Cuando llego a la clase, para mi sorpresa no había nadie. ¿Se habrá cansado de esperar? Tampoco llego tan tarde ¿No?
Saco los libros y los coloco encima de la mesa, si no viene ese tan James aprovecharé para estudiar aquí, mejor que en casa... Al sentarme, oigo como alguien se acerca, pero no viene solo.
Es el director "Esta es la aula, ya verás como Ali te sirve de gran ayuda. "
Uf, menos mal, agacho la cabeza y hago como si estuviese escribiendo, para disimular un poco.
"Buenas tardes Ali, este es James, seguro que os llevareis bien y conseguirás que vaya al día."

Levanto la cabeza, ese olor... ¡No puede ser! Esos ojos azules son inconfundibles ¿El bailarín?