Poco a poco.

Es cierto que, hay momentos en la vida de una persona en los que notas como tu visión de la positividad, de la felicidad, se va oscureciendo poco a poco con el pasar de los días.
Más oscuro.
Y más oscuro.
¡Joder!
Tan oscuro que te ciega por completo.
Empiezas por sentirte desplazada por tus amigos,
más tarde por tu familia,
y finalmente terminas por alejarte hasta de tu propia sombra.
Sientes como te vas consumiendo y que no hay nada ni nadie que sea capaz de sacarte de este puto pozo sin fondo al que por más que quieras no vas a encuentrarle el final y tu trayecto se sigue alargando.
Bajas un peldaño tras otro.
Otra planta.
Estas en ese tan temido sotano y aún así sigues bajando.
Lo peor de todo es que sabes que llegará tarde o temprano tendrás que parar y llegar a un final inexistente, el suelo contra el que te estamparás a no ser que haya alguién que sea capaz de esperarte sin darse por vencido para poder cogerte al vuelo.
Pero justo en ese momento sabes la respuesta.

Comentarios

Entradas populares